En las últimas horas trascendió por los medios de comunicación que el alcoholímetro utilizado en el accidente vehicular ocurrido el 18 de Marzo del corriente se encontraría, al momento de realizar el respectivo control por parte de la Dirección de Tránsito de la ciudad de Necochea, en estado DEFECTUOSO.

En primer término sería prudente que el Director de Tránsito, Julián Corro, quien cumple funciones para el Intendente Arturo Rojas, dé las explicaciones sobre el funcionamiento debido o incorrecto del alcoholímetro.

En segundo lugar, y una vez confirmado de la propia voz del Departamento Ejecutivo Municipal, que intenta guardar los hechos debajo de la alfombra como si nada hubiese pasado, y se confirmara lo que extraoficialmente todos sabemos, debemos reflexionar en manos de quien está nuestra seguridad vial; que al producirse este hecho vergonzoso solo denota lo inconducente que es el sistema del actual Estado Municipal para sus conciudadanos que paradójicamente son los que lo sostienen.
Muchos son los interrogantes que se presentan ahora, como por ejemplo ¿Podrá revelarse si el conductor del vehículo efectivamente manejaba ebrio? ¿Se realizó un análisis de alcohol en sangre para determinarlo? Si no es así ¿Cuánto le saldrá al Estado Municipal, es decir, a los vecinos, la difusión de una informacion que terminaría siendo falaz.

¿Todos los controles de alcoholemia que se realizaron durante la temporada estival fueron hechos con el mismo alcoholímetro? Si es así, ¿el Estado Municipal, es decir, los contribuyentes, deberán reembolsar todas las multas que se cobraron por esta infracción?
¿Fue negligencia e impericia por parte del Departamento Ejecutivo Municipal, o fue a sabiendas con la intención deliberada absolutamente recaudatoria?

Para terminar, ¿Cómo va a lograr el Intendente, Arturo Rojas, la confianza y el esfuerzo que todos los días le exige a nuestros vecinos aumentando el 50% las tasas, cuando lo básico y elemental del sistema que propicia falla?
El hecho de que teóricamente el conductor había batido el record mundial de alcohol en sangre al volante, se difundió en medios de comunicación locales, nacionales e incluso internacionales, demostrado claramente, y si así fuese, una imagen de absoluta irresponsabilidad por quien habría cometido el ilícito.
Ahora bien ¿Cómo deja la imagen de nuestra ciudad ante los ojos de los demás, incluso del mundo, nuestro Sr. Intendente, Arturo Rojas, con el infortunio o no, vaya a saber, de que el alcoholímetro estaría roto?
Vergüenza les tiene que dar a estos funcionarios y dirigentes que dicen hipócritamente “Necochea Primero.”

M. Eugenia Vallota. Carlos Torres. Eduardo Costa. Carolina Cerfoglio. Patricia Piedra. Marcelo Bruno. Matías Ferrazzini. Gabriela Cañamares. Darío Villareal. Aldo Martínez.
PRO NECOCHEA

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